¿Qué opciones tenemos si queremos migrar a México?

¿Qué opciones tenemos si queremos migrar a México?

Si estás pensando en ir a México trabajar –ya sea con algún proyecto temporal o de carácter más bien permanente- debes saber que existen varias formas de proceder. Te contamos las tres opciones que tienes:

1. Forma migratoria múltiple

Es la que tiene carácter más temporal. Está pensada para todos aquellos que quieran ir a México por razones turísticas, reuniones de negocios, asistencia técnica en alguna empresa que esté en México, representación de una empresa extranjera, etc. También es la forma que se adopta cuando se quiere hacer el cambio del visado que te da el Consulado de México a cambio de la tarjeta de residencia permanente. Es importante destacar aquí que es un proceso que implica que todo sueldo o remuneración por acción realizada en el país sea pagada des del extranjero.

La validez de este documento es de 180 días naturales y se cuenta a partir de la fecha de ingreso. Estos 180 días no son prorrogables en ningún caso ni tampoco se puede cambiar de categoría (los únicos que pueden son los familiares dependientes, que podrán cambiar a ser residentes sin tener que abandonar México).

2. Residente temporal con contrato fuera de México (desplazados)

Hay un sinfín de profesionales que se encuentran con la situación de que sus empresas les envían a pasar largas temporadas fuera de la sede original. Estos profesionales reciben el nombre de desplazados y su principal característica es que aunque esté bastante tiempo fuera, quien les paga el salario es la empresa que se sitúa fuera de México, la empresa original que lo ha desplazado. El tiempo que puede durar este tipo de permiso va de entre los 180 días y los 4 años. Se tendrán que hacer dos pasos:

• Tramitar el Visado de residente temporal: este documento se expide en el Consulado de México del país de origen. Normalmente tarda ente dos y diez días y tiene una validez inicial de 180 días. Solo se puede entrar en el país una vez con él. Para conseguirlo se tiene que acreditar que tenemos la titulación académica que corresponde y la experiencia necesaria para cumplir con las funciones que debemos realizar una vez allí.
• Tramitar la Tarjeta de Residencia: este paso debe hacerse ante la oficina de Migraciones, ya en México. Es importante tener en cuenta que se debe hacer en los primeros 30 días, aún siendo vigente durante 180. Una vez tramitado te entregan la Tarjeta de Residente y tardan entre dos y tres semanas. Tiene una validez de un año, pero prorrogable.

3. Residente temporal con contrato en México (expatriado)

La diferencia principal entre este caso y el anterior es que en el caso de los expatriados, el salario se cobra en México, por lo que el contrato de trabajo se firma ya allí. El tiempo de vigencia es el mismo que en el caso anterior: entre 180 días y cuatro años. Los pasos a realizar son:

• Tramitar el permiso de trabajo: como hemos visto antes, este paso se debe hacer en las oficinas de Migraciones y tarda entre dos y tres semanas.
• Tramitar el visado de residente temporal: se debe hacer desde el país de origen, en nuestro caso España.
• Tramitar la tarjeta de residente: también deberemos presenciarnos en la oficina de Migraciones de México para ello. Tendremos un periodo de tiempo de 30 días para hacerlo y tendrá una validez de un año que será prorrogable hasta los cuatro.

Los residentes temporales (casos 2 y 3) deberán tener en cuenta varias cosas:

1. Una vez transcurridos los 4 años máximos que permite el permiso, se puede solicitar la Tarjeta de Residencia Permanente. Tarda más o menos un mes.
2. Los familiares del interesado podrán entrar con él si primero lo hacen como turistas (con la FMM) y luego se hacen la tarjeta de residencia.
3. Existe una ley que dice que en las empresas solo puede haber un trabajador extranjero por cada 10 mexicanos, y además este extranjero se tiene que demostrar que tienen una titulación o unos conocimientos que no pueden ser cubiertos con profesionales del país (pero no os preocupéis que se trata de una ley bastante flexible según el tipo de empresa y actividad).