¿Cuáles son las ventajas de internacionalizar nuestra empresa?

Una de las cosas que se plantean muchas empresas es hacer el salto hacia la internacionalización. Es quizá un paso que puede dar un poco de miedo al principio, pero que en cambio nos puede ofrecer muchos beneficios, ya que estaremos ampliando al máximo nuestra cuota de mercado encontrando nuevos clientes a quiénes vender nuestros productos o servicios.

¿Te ayudamos?

Hay algunos ejemplos muy evidentes de éxito, cosa que permite aclarar algunas dudas que se puedan tener. En cálculos generales, las pequeñas y medianas empresas que han decidido dar el paso facturan casi un 33% fuera del país.

Consejos para convencerse

En el diario ABC publicaron hace un tiempo una lista de consejos que puede ayudar a que las empresas se animen a mirar más allá de la frontera. Son esos puntos:

Si nos internacionalizamos, evitamos que una empresa mayor nos pueda absorber. Cuando tenemos un negocio muy enfocado a lo local, es fácil que venga alguien más grande, pero si decidimos crecer, a la larga puede ser incluso al revés y ser nosotros quienes nos comamos a los grandes. Hay muchos casos que gracias a la ayuda de Internet han conseguido crecer desmesuradamente.
Salir es crecer: cuando se internacionaliza estamos, de hecho, creciendo. Son más los productos y servicios que se venden y por tanto la facturación también crece.
Nos convertimos en más productivos: al tener una mayor demanda, crece también nuestra productividad. Esto va bien para la empresa pero también para los que trabajan en ella, ya que al final todo se traduce en más empleo y más ganancias (en principio, vaya).
Evitar la crisis: estar en un solo país hace que si este país entra en crisis, nosotros también. En el caso de España es muy evidente, ya que llevamos varios años de crisis económica. Aunque parce que la cosa ya está un poco mejor, podemos ver como las empresas que tienen mercado internacional están aguantando mejor. Esto es normal: no todos los países entran en crisis a la misma vez, y es más: no todos los países tienen crisis.
Buscar oportunidades en países emergentes: otra gran oportunidad son los países emergentes. Países como la India, Chile o muchos más están ofreciendo un potencial mercado al cual vale la pena acercarse y desarrollar negocios en ellos. Cada año se publica un listado con los países más emergentes: os recomendamos dar un vistazo y tenerlas en cuenta.
Reducir costes con la economía de escala y la deslocalización: hay procesos que salen más económicos cuando se realizan en otra parte, y también hay que contar con los procesos que se economizan al hacerlos a gran escala. Lo mismo pasa con la producción: no es lo mismo fabricar 100 pares de zapatos que 1000, por lo que a más producción, más barato sale.
Integración en el país: sea cual sea el país en donde queremos crecer (o países) lo que deberemos hacer en todo momento es aprender cómo se trabaja allí para optimizar las posibilidades de trabajo. Es muy importante conocer las condiciones laborales, económicas y, sobre todo, legislativas. Cada país tiene sus leyes y debemos estar al caso de ellas. ¡En todo momento debemos aprovechar y aprender al máximo!
Motivación de los empleados: generalmente, un crecimiento así hace que los trabajadores estén más motivados. La razón principal es el sentimiento que se genera de pertenecer a una gran empresa que crece. En este punto es muy importante que la empresa cuide a sus trabajadores, ya que toda la motivación que pueden ganar por una banda se puede perder si no hay ningún tipo de compensación social ni económica.
Crecimiento del valor de marca: por último, el hecho de crecer hará que nuestra marca se conozca mejor. Si ello lo acompañamos de una buena política de comunicación y difusión, estaremos dando un gran paso que hará que cada vez más gente nos llame o pregunte por nuestros servicios o productos.

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