¿Qué recursos necesita una empresa para internacionalizarse?

Si tenéis una empresa y queréis iniciar un proceso de internacionalización, es posible que os interese saber qué recursos hacen falta. En este artículo os damos alguna información de interés para que podáis utilizarla.

Etapas que deberemos seguir

Aunque cada empresa tiene sus propias etapas y pueden cambiar según el sector al cual nos dediquemos, hay algunas etapas que más o menos serían comunes a todos:

  • Visión, Modelo, Negocio y Estrategia: definir bien la base de nuestra empresa nos hará entender mejor lo que queremos encontrar fuera. Una vez hecho este análisis nos pude servir para justificar según qué acciones, pedir alguna ayuda o subvención, etc.
  • Plan de Internacionalización y de Negocio: que sería la base para abrirnos al mundo
  • Gestión del despliegue: los pasos a seguir a la hora de empezar con el proceso
  • Logística: ¿quién ser hará cargo de qué?
  • Comunicación: tanto interna como externa, básica para el correcto funcionamiento del proceso.
  • Promoción y contactos: sobre todo en el país destino, donde nos hará falta tener algún aliado con quien confiar y expandirnos, sino puede resultar muy difícil.
  • Negociación y cierre: para dejar todos los cabos atados y empezar con el proceso
  • Seguimiento de Ventas: pueden cambiar de un año a otro, debemos seguir el proceso y comprobar que se desarrolle dentro de la normalidad. En teoría deberían ir creciendo cada vez más.
  • Fidelización: con el público local para engrosar el valor de la marca
  • Repetición de ventas: como hemos dicho, controlar las ventas es un punto importante en cualquier ampliación de empresa y/o mercado.
  • Seguimiento y control: indispensable, siempre. No podemos dejar que el proceso se desvincule de la empresa ni de la gestión matriz.

¿Qué servicios necesitaremos desarrollar?

Como en el caso anterior, estos pueden cambiar según el sector o el tipo de empresa, pero hay algunos servicios que deberíamos desarrollar sin excusa, como por ejemplo el apoyo en ventas, la inteligencia competitiva, abogados que puedan solucionar imprevistos o temas de leyes y permisos, marcas, la selección de personal, la elaboración de la página web, transportes y traslados, traducciones y legalizaciones, etc.

Todos estos servicios o partes de un todo las podemos afrontar de dos modos: por una parte podemos asumirlas nosotros como empresa (lo que significa asumir muchas más responsabilidades y cargarnos más de trabajo) o bien externalizarlo a empresas expertas en este campo. Suele salir más caro, pero a la larga se compensa totalmente.

Sea como sea debemos tener muy claro que son muchos procesos y que, si se asumen desde dentro necesitaremos dedicar muchas horas que no son directamente el proceso en sí sino sus derivados. En cambio si se externalizan también deberemos tener muy claro que hace falta una coordinación excelente para que todo cuadre.

El problema de la externalización

A parte del problema que acabamos de mencionar, nos encontramos con que es muy difícil encontrar empresas que se dediquen de forma integral a ello. Lo complicado es cuando hay por ejemplo 10 procesos y 10 empresas diferentes. Esto es complicadísimo de gestionar. En cambio, si todo lo puede hacer una sola empresa (o dos, a mucho apurar) la cosa se simplifica bastante. Pero claro, es difícil encontrar empresas competentes en todo esto a la vez y que además conozcan un poco el sector por donde te mueves.